Hana Dancer: la bailarina psicologa

Natalia Rodríguez Bejarano o Hana Dancer nacida en Colombia y residente en Canadá es la mujer que se ha desarrollado tanto física como mentalmente y transmite su conocimiento sobre cómo llevarlo acaba diariamente. Todo esto lo hace a través de la psicología y la danza, en una fusión que ella ha creado.

 

La reseña

Natalia es además una apasionada por la cultura oriental e instructora certificada de Hatha Yoga, por mucho no menos importante hay que recordar que es psicóloga con un máster en Neuropsicología Clínica.

Por su pasión a la cultura oriental es que ahora también es bailarina profesional de Danzas Orientales y maestra de las mismas.

“Poder moverme sin reservas, poder sentirme desde la profundidad de mi ser y expresarlo para mí y para otros, sentirme en la libertad de ser yo misma en todas mis facetas, sin juicios, obsequiarle honestidad a quien me ve… Regalarle a alguien un instante con una persona sin mascaras, que no teme estar expuesta y abrir su alma mediante el movimiento.”

Miguel Angel Morales © Solkes

A lo largo de su carrera ha logrado fusionar e implementar sus conocimientos profesionales con las innumerables bondades de la danza y las disciplinas orientales.

De esta forma ha desarrollado una pedagogía propia y un enfoque terapéutico diferente  para enseñar y apoyar a cualquier persona de manera lúdica y de forma estimulante.

Uniendo no sólo el ámbito físico y sensorial, sino también una dimensión integral del ser, es así que crea Dansanando un sistema terapéutico para sanar a través del movimiento consciente y la danza.

En su práctica propende por formar no solo bailarines, sino seres integrales y conscientes, que a través del aprendizaje de su corporalidad logren superarse y comprender todo su potencial y fortalezas.

Natalia es sin duda una mujer emprendedora, pero también está completamente comprometida con empoderar a otras mujeres.

Esta convencida  que el camino para trascender es conectar toda la fuerza femenina, generar hermandad y así transformar realidades.

 

El mundo de la danza

Cómo muchos artistas, Natalia también se inspira y goza de las bellas artes. Para la intripida bailarina dedicarse a la danza no es un gozo egocentrentico, es un proceso de dar y recibir.

A ella la motiva la libertad que siente al bailar pero con un perfecto dominio sobre su cuerpo y el sentimiento de trascendencia que le proporciona y al mismo tiempo entregar el acto como el tesoro que es a su público.

Sin duda Hana Dancer no dejará de disfrutar y brindar esté bello estilo de vida porque siempre al estar danzando se sigue inspirando, convirtiéndose en un maravilloso círculo.

María Conchita Cortes © Solkes

 

Dansanando

Dansanando, un sistema de danza terapia cuya herramienta principal son las danzas orientales y que te ayuda a reconocerte desde tus propias emociones, a aceptarlas como parte fundamental de tus aprendizajes vitales y a reconectarte con ellas para beneficio tuyo y de tus relaciones.

“Aprendes a verte tal y como eres en toda tu plenitud y aceptando lo que eres en su totalidad, con tus luces y sombras. La práctica de la danza te va ayudando a ganar auto-confianza, autoestima y un profundo autoconocimiento.”

Ya hablamos un poco de como es el mundo de la danza para Natalia. pero cómo fue que se le ocurrió esta mezcla entre el baile y la psicología? Pues para ella fue algo muy coherente pero no inmediato, puesto que sabía perfectamente que desde hace mucho tiempo ya existen varias corrientes terapéuticas con un enfoque similar.

Fueron creadas por personas que al igual que ella se dieron cuenta de que la danza es un proceso sanador y entonces estructuraron sistemas para ayudar a otros a sanar sus procesos emocionales y afectivos mediante el movimiento.

María Conchita Cortes © Solkes

Sin embargo, para Natalia que inició a muy temprana edad a bailar y en su juventud encontró y se enfocó a las danzas orientales mientras que siguió su vida académica y se formó como psicóloga.

Así es que se encontraba dividida, por un lado danzaba y enseñaba a bailar y por otro lado ejercía su profesión. Pero por suerte llegó el momento en que simplemente ocurrió sus dos amadas disciplinas se fueron uniendo.

Ella fue tomando consciencia de el proceso sanador que la danza ejercía sobre ella. También que sus clases de baile no eran únicas y específicamente dedicarse a la técnica sino que realmente ayudaba a sus estudiantes en sus procesos sanadores.

Todo lo que afloraba mientras el aprendizaje eran situaciones muy íntimas que afectaban en todos los aspectos de la vidad de estas personas. Fue el conjunto lo que la llevó a que sus enseñanzas no se podía quedar en la danza de la forma sino en la danza del fondo.

Como todos los terapeutas similares tuvo que gestar un sistema para poder implementar la danza y la psicología en sus clases y fue así que surge Dansanando. Sin duda esto revolucionó y tuvo implicaciones super positivas tanto para las clases de Natalia como para su propia vida.

Para muchos no está claro como es posible que la danza ayude a sanar, así que le preguntamos a Natalia muy directamente cómo es este proceso de Dansanando.

“Es un proceso que actúa como un espiral que va de afuera hacia adentro, primero aprendes a conocer muchas de tus capacidades físicas y a superar tus limitaciones en cuanto a poder moverte de formas determinadas.”

 

Por lo que ella nos responde únicamente queda señalar que todos los procesos requieren tiempo y esfuezo además de paciencia y sin duda son individuales. Posiblemente una persona pueda decinos que en un mes de clases se ha sentido increíble y que la evolución es notoria e inmediata y otra persona que requiera meses.

 

Los cursos y las clases

Muchos se preguntarán y dónde o cómo me puedo inscribir con Hana Dancer, pues bien si vives en Montréal puedes acceder a sus cursos. Esto puede ser de forma regular tanto grupal o individual.

Por lo general las clases tienen una duración de hora y media a dos horas, la dinámica es que mediante el aprendizaje de la danza oriental y la respiración consciente van surgiendo diversas situaciones que se gestan por el movimiento.

Natalia va todo el tiempo guiando y apoyando en esos procesos de autodescubrimiento y reencuentro a sus estudiantes. Juntos construyen una nueva forma de verse a sí mismos y su realidad.

Ahora en Montréal, Canadá, se encuentra trabajando con un grupo de mujeres que motivadas por aprender danza oriental también se han permitido un espacio de autoconocimiento y descubrimiento personal.

También imparte talleres, conferencias y seminarios, estos se diseñan y elaboran a petición de la institución o el grupo que tenga el interés en brindar a su equipo, clientes o miembros un espacio de danzaterapia con el sistema Dansando, estos se desarrollan de acuerdo a las necesidades de quién lo pide.

 

La labor de terapeuta

Para la dedicada maestra y psicóloga lo más satisfactorio de su labor es sin lugar a duda el acto de bondad que realiza al ayudar a los demás.

“Bailar en sí mismo es un acto que te genera profundo bienestar, ahora bien, si tu puedes ayudar a otros a sentirse bien mediante el aprendizaje de la danza  ese es ya el punto más alto de mi labor, ahí siento que estoy totalmente realizada.”

Su labor le recuerda y la hace ratificar la razón por la que desde tiempos inmemorables los humanos creamos la expresión del movimiento a través de la danza como forma de sanación. Para ella es un gusto cuando se retoma dicho camino. Por que sabe todo el poder que se tiene con el movimiento consciente y lo que implica ponemos al servicio de los demás.

Ninguna labor es fácil, pero los obstáculos vencidos muestran de que estamos hechos, Natalia no es la excepción, ella sabe perfectamente que lo primero para triunfar es eliminar los límites que uno mismo se coloca.

María Conchita Cortes

Como ejemplo nos comenta que ella no se sentía prepara o con las suficientes herramientas para crear el sistema de danzaterapia. Esto sin importar que en realidad ya lo hacía sin darse cuenta y que tenía ya 15 años de experiencia como bailarina, profesora y psicóloga.

Se le dificultaba consolidar sus conocimientos intelectuales y vivenciales. Pero como la mujer fuerte que es se decidió a quitar sus limitantes y a seguir con su labor con una visión de construcción, siempre mejorar es una meta.

Natalia no sólo es docente, se sigue dedicando al baile profesional y le encanta hacer performances para ayudar a otros a través de la apreciación de su arte. También hace presentaciones en eventos privados y en dónde la inviten a presentarse.

En algunos lugares de Canadá lo hace en forma de un voluntariado. El costo para ver las presentaciones varia según la organización y los gastos para realizar la misma.

 

Las metas

Para Natalia su principal motor es seguir ayudando y aportando al mundo. Entre sus metas se encuentra llega a más gente en Canadá y el mundo, aunque ya cuenta con algunos espacios en Montéal quiere conseguir más.

Oscar López © Solkes

Tenemos que agregar que también desea que más profesionales de la danza y terapeutas conozcan su sistema y lo repliquen para que la ayuda llegue a todos.

Para los que estamos algo retirados podemos seguirla en sus redes sociales y de esta manera apoyar a la difusión de este valioso sistema de Dansanando y de la impresionante Natalia.

Si se encuentran por Montréal dénse la posibilidad de admirar alguna de sus presentaciones o incluso formen parte de sus cursos.

Natalia es una gran persona que desea el bien para todo el mundo. Esta exitosa mujer es una excelente profesional que imparte sus conocimientos y su regala su arte a través de la danza.

Toda la información la podrán encontrar en:
Youtube: https://www.youtube.com/channel/UCoGkJYAqUdUCwoj_TAuDofw
Facebook: https://www.facebook.com/dansanando/
https://www.facebook.com/groups/danzaconhana/
Instagram: natalia_hanadancer

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