Boston, Massachusetts, es una de esas ciudades que hay que visitar al menos una vez (opinión personal). Realmente lo tiene todo; desde su rica historia hasta su vibrante cultura. La verdad es que no importa si eres un aficionado a la historia, a la gastronomía o a la naturaleza, Boston tiene algo para todos.
Sin duda, es una de las ciudades más históricas, ricas e influyentes de los Estados Unidos de América. Es conocida sobre todo por sus famosas alubias cocidas, el Fenway Park y las bellas artes. Es la octava mejor ciudad del mundo en cuanto a calidad de vida. Los barrios de Boston ofrecen oportunidades al aire libre para respirar aire puro y hacer ejercicio sin tener que salir de los límites de la ciudad. La ciudad recibe 16,3 millones de visitantes al año, lo que la convierte en uno de los diez lugares turísticos más populares del país.
El contexto
Como siempre, lo primero es entender un poco el lugar sobre el que escribimos con tanto cariño.
Boston, es la capital y ciudad más poblada de la Commonwealth de Massachusetts. También es el centro cultural y financiero de Nueva Inglaterra, en el noreste de Estados Unidos.
Boston es uno de los municipios más antiguos de Estados Unidos. Fue fundada en la península de Shawmut en 1630 por colonos puritanos (protestantes ingleses de los siglos XVI y XVII) procedentes de Boston, Lincolnshire.
Durante la Revolución Americana, aquí tuvieron lugar varios acontecimientos clave.
Algunos de ellos fueron: la Masacre de Boston (fue un enfrentamiento que tuvo lugar el 5 de marzo de 1770, en el que nueve soldados británicos mataron a tiros a varias personas), la Fiesta del Té de Boston (una protesta política y mercantil estadounidense que tuvo lugar el 16 de diciembre de 1773 por parte de los Hijos de la Libertad en Boston).
El problema era que la Compañía Británica de las Indias Orientales podía vender té de China en las colonias americanas sin pagar impuestos), la batalla de Bunker Hill y el asedio de Boston (fue la fase inicial de la Guerra Revolucionaria Americana).
Tras la independencia de Estados Unidos de Gran Bretaña, la ciudad siguió desempeñando un importante papel como puerto, centro manufacturero y centro educativo y cultural.
La ciudad es conocida por haber sido pionera en Estados Unidos. Ejemplo de ello son: el primer parque público (Boston Common, 1634), la primera escuela pública (Boston Latin School, 1635), el primer sistema de metro (Tremont Street subway, 1897) y la primera gran biblioteca pública (Boston Public Library, 1848).
En el siglo XXI, Boston emergió como líder mundial en educación superior e investigación académica.
Es sede de numerosas facultades y universidades. Algunas de ellas son: Boston University, Suffolk University, Tufts Univertity, Harvard y MIT, entre otras.
Además, las renombradas universidades de la ciudad no sólo producen graduados de primer nivel, sino que también sirven como centros de investigación y desarrollo, espíritu empresarial y asociaciones industriales.
Esta relación simbiótica entre educación y economía sostiene la posición de Boston como centro mundial de innovación.
Pero permítanme que les explique un poco por qué. Boston es una de las ciudades más antiguas de Estados Unidos, y la mayoría de sus universidades se construyeron a partir del siglo XIX.
Boston dio mucha importancia a la educación desde el principio. Tiene casi 400 años de inversión continua en educación.
La ciudad es también líder nacional en investigación científica, derecho, medicina, ingeniería y negocios.
Lo que queda claro es que la educación es indispensable para la identidad y la prosperidad de Boston.
El pueblo inglés de Boston es la inspiración de la ciudad de Boston. Los residentes de primera generación de Boston, Inglaterra, llamaron a la ciudad “Boston”.
En realidad, lo que ocurrió fue que el 30 de septiembre de 1630, uno de los últimos actos oficiales de Johnson como líder de la comunidad de Charlestown fue llamar “Boston” a su nuevo asentamiento al otro lado del río.
Bautizó el asentamiento con el nombre de su ciudad natal en Lincolnshire, el lugar desde el que él, su esposa (homónima de la Arbella) y John Cotton (abuelo de Cotton Mather) habían emigrado a Nueva Inglaterra.
El nombre de la ciudad inglesa deriva en última instancia de su patrón, San Botolph, en cuya iglesia sirvió como rector John Cotton hasta su emigración con Johnson.
Es importante señalar que Boston es una ciudad relativamente pequeña y fácil de recorrer a pie o en transporte público. El sistema de metro de la ciudad, conocido como “T”, es una forma cómoda y asequible de desplazarse.
El turismo es una industria importante en Boston. La mayoría de los visitantes de Boston proceden de Estados Unidos, y los principales mercados emisores son Nueva York, California y Florida. Además, los visitantes internacionales también desempeñan un papel importante en la industria turística de Boston, siendo Canadá, el Reino Unido y China los tres principales mercados emisores.
El Centro de Convenciones y Exposiciones de Boston es uno de los mayores centros de convenciones de Estados Unidos, acoge más de 200 eventos y atrae a más de 600.000 asistentes al año.
La mejor época para visitar Boston es el otoño (septiembre-noviembre), cuando el tiempo es templado y el follaje precioso. La primavera (marzo-junio) también es una época popular para visitarla, así como el verano (junio-agosto), aunque puede estar abarrotado y hacer calor.
Un paraíso culinario
Boston es un paraíso culinario. Esto quiere decir que ot ofrece una exquisita mezcla de sabores y experiencias culinarias. Hay absolutamente de todo. Desde sopa de pescado hasta rollitos de langosta, el marisco de la ciudad está para morirse.
El Quincy Market es la perfección. Es un edificio histórico cerca de Faneuil Hall, en el centro de Boston. Se construyó entre 1824 y 1826 y recibió su nombre en honor del alcalde Josiah Quincy, que organizó su construcción sin ningún impuesto ni deuda.
Es uno de los mayores complejos de mercados construidos en Estados Unidos en la primera mitad del siglo XIX. En 1996 fue designado Monumento Histórico de Boston.
Aquí la gente puede encontrar un cúmulo de cocinas internacionales. Sin embargo, si lo que le apetece es una comida tradicional de Nueva Inglaterra, Faneuil Hall es el lugar ideal.
Pero el marisco es realmente la estrella de la ciudad. Hablo de varios estilos de rollos de langosta, de un gran número de ofertas de ostras a un precio de un dólar, de un sushi excepcional, por no hablar de los chiringuitos de almejas fritas que abundan sobre todo al norte de la ciudad.
El distrito Seaport, al sur de Boston, es el mejor lugar para degustar rollos de langosta, sopa de almejas, ostras y otros frutos del mar. Cene en elegantes locales con cristaleras que van del suelo al techo y que ofrecen agradables vistas del puerto.
Además del marisco, otras especialidades regionales son los sándwiches de roast beef al estilo de North Shore, las pizzas de bar al estilo de South Shore e incluso rarezas como el sándwich chop suey de Salem y el sándwich chow mein de Fall River.
La región tiene dos estilos principales de alubias cocidas: Boston baked beans y Maine baked beans. La diferencia entre ambos estilos es que las alubias de Boston se elaboran con alubias blancas pequeñas o alubias de guisante de piel fina, mientras que las de Maine se elaboran con variedades autóctonas de alubias de piel más gruesa. Las variedades utilizadas en Maine son Marafax, soldier, y la variedad de alubia cocida más popular en Maine es la yellow-eye.
Ambas variedades suelen prepararse con carne de cerdo salada o tocino. Sin embargo, también existe una larga tradición de alubias cocidas vegetarianas elaboradas con la misma receta que las Boston baked beans o las Maine baked beans, pero hechas sin añadir cerdo salado ni tocino.
Los italianos se establecieron en esta ciudad a finales del siglo XIX, y el North End* de Boston, aunque aburguesado, sigue siendo un hervidero de cultura italiana. Recorra el distrito comiendo en pequeñas trattorias familiares, panaderías veteranas y cafeterías que sirven helados. Si no prueba nada más, deguste un cannoli, un crujiente tubo de hojaldre generosamente relleno de ricotta dulce. Encontrará los mejores en Mike’s Pastry.
Un refugio cultural
Cada barrio de Boston tiene su propio encanto y crea una cultura diversa.
El extremo sur está de moda. Es el lugar ideal para encontrar galerías de arte, boutiques y encantadoras casas de piedra rojiza.
Chinatown es vibrante.
Back Bay, construida sobre terrenos ganados al mar en la cuenca del río Charles. Allí se encuentra la mágica BPL, situada frente a Copley Square, que atrae a decenas de grupos de estudiantes, visitantes y aficionados a la lectura a su polifacético complejo. Es un placer perderse en su laberíntica estructura; no deje de visitar el patio claustral, un lugar de lo más tranquilo.
Es la sede de la Iglesia de la Trinidad. La Iglesia de la Trinidad, descaradamente ornamentada, es la pieza central visual de Copley Square. La iglesia es conocida por sus extensos murales. Las impresionantes vidrieras incluyen cuatro diseñadas por el pintor prerrafaelista inglés Edward Burne-Jones y realizadas por el pionero de las Artes y Oficios William Morris.
El Mapparium, el globo terráqueo más grande del mundo, es uno de los monumentos más peculiares de la ciudad. Esencialmente un modelo de tres pisos del globo terráqueo construido a escala, la esfera perfecta tiene 9 metros de diámetro, y se puede cruzar por medio de un puente de cristal que biseca su interior. Los 608 paneles de vidrieras recrean el mundo tal y como era a mediados de la década de 1930, cuando se terminó el proyecto. (Los aficionados a la geografía notarán los bordes y nombres anticuados).
El North End es sencillamente precioso. Está impregnado de la rica historia de la ciudad, ya que ostenta el título de barrio más antiguo de Boston y alberga tres atracciones del Freedom Trail. Lo que hace de este barrio un punto de interés de primer orden es su cultura italiana, considerada como la Pequeña Italia de la ciudad.
Aunque los italianos no fueron los primeros en asentarse en esta zona (primero llegaron los colonos ingleses y luego los judíos europeos, los afroamericanos y los inmigrantes irlandeses), su influencia cultural en el North End resistió el paso del tiempo.
Eso significa que hoy en día encontrará todo tipo de comida italiana, desde las clásicas pizzas servidas en la popular pizzería Regina hasta marisco al estilo siciliano, como linguini negros (hechos con tinta de calamar) y albóndigas de calamares en The Daily Catch.
El barrio también es conocido por organizar fiestas memorables. Todos los veranos, el North End celebra fiestas italianas y procesiones tradicionales en honor a un puñado de santos. La fiesta más importante y popular del verano es la de San Antonio, que se celebra a finales de agosto. Apodado el mayor festival religioso italiano de Nueva Inglaterra, el evento cuenta con espectáculos en directo, desfiles y más de 100 carritos llenos de deliciosa comida italiana.
Diversión en familia
Quizá la gente piense que una ciudad llena de tanta historia es sólo para gownup. Se equivocarían. Hay muchas opciones diferentes.
El Museo de la Ciencia de Boston es un destino estupendo para familias con niños.
Tanto padres como hijos quedarán maravillados con las exposiciones. La escalera musical llamada Soundstair es un lugar genial para que los niños quemen algo de energía. En Science in the Park hay una zona de juegos interactiva donde pueden aprender sobre el impulso, la ventaja mecánica y el movimiento armónico.
Creo que el Museo Infantil de Boston es muy chulo y tiene muchas cosas que ofrecer. Los niños pequeños se divertirán mucho en la sala de las burbujas. Está situado en el canal de Fort Point. Esto significa que hay estupendas vistas de la ciudad sobre el canal y refrescantes brisas.
Por supuesto, una visita a Boston no estaría completa sin una visita al Acuario de Nueva Inglaterra, en el pintoresco Waterfront de Boston. El singular tanque central de cuatro pisos muestra todos los coloridos habitantes de su arrecife de coral caribeño, con pequeños tiburones, muchas variedades de peces y una enorme tortuga marina. Cabe destacar que se trata de una organización de investigación y conservación sin ánimo de lucro que lleva más de 50 años protegiendo y cuidando de nuestros océanos y animales marinos.
Deportes y cosas que no hay que perderse
Algo que nunca se pierde es la enorme afición por el deporte que tienen todos los bostonianos. La cultura deportiva aquí es contagiosa.
Entre ellos destacan los Red Sox (béisbol), los Celtics (baloncesto, en el estado donde se inventó este deporte) y los Bruins (hockey sobre hielo). Los New England Patriots (fútbol americano) y los New England Revolution (fútbol, o fútbol asociación) juegan en el Gillette Stadium, en la cercana Foxborough (Massachusetts).
Un dato interesante es que, según el folclore estadounidense, Pilgrim observó una forma de fútbol llamada pasuckuakohowog que jugaban los nativos americanos de la costa de Massachusetts ya en 1620.
Esta ciudad ofrece muchas cosas, sitios y actividades. Algunas de ellas son las siguientes.
1. El Sendero de la Libertad. Tiene 3,2 km de longitud. Pasa por 16 de los lugares más históricos que ofrece la ciudad. Algunos de estos lugares famosos son: Faneuil Hall Marketplace, la Paul Revere House y la Old North Church. Para empezar el recorrido, tome la línea roja o verde hasta la estación de Park Street y diríjase al Centro de Visitantes del Boston Common. Necesitará al menos medio día para recorrerlo todo y no olvide llevar calzado cómodo. La mayoría de la gente estará de acuerdo en que el sendero es fácil de recorrer, por otro lado, algunos recomiendan una visita guiada o descargar una app que te informe sobre los sitios.
2. Jardín Público de Boston. Este jardín está al lado del Boston Common, pero son muy diferentes. El jardín público se fundó en 1837 y tiene el honor de ser el primer jardín botánico público de Estados Unidos. Las flores y los árboles están bellamente organizados y se mantienen en condiciones de calidad en todo momento. El parque alberga dos de las estatuas más emblemáticas de Boston: Make Way for Ducklings y una escultura de George Washington (que muestra al primer presidente de Estados Unidos montado a caballo).
3. Boston Common. Los terrenos del Boston Common empezaron siendo un pasto para vacas a mediados del siglo XVI. También se utilizó para castigos puritanos, como la flagelación, e incluso para ahorcamientos. También se organizan actividades y eventos durante todo el año. Es un lugar ideal para ir de picnic o dar un paseo tranquilo, como relajarse junto al sereno Frog Pond.
4. Museo de Bellas Artes. Es una de las instituciones artísticas más completas del país. Alberga una de las mejores colecciones de arte del mundo, incluida la célebre ala de Arte de las Américas. Aquí se expone una impresionante colección de arte asiático, además de obras de Monet, Renoir, Manet y Rembrandt.
Si le apetece vivir aventuras al aire libre, no se preocupe. Navegar en kayak por el río Charles es un plan estupendo. El mejor momento para hacerlo es desde el verano hasta principios de otoño. Hay 2 lugares cerca de Boston: Cambridge, en Kendall Square, y Allston/Brighton, en Christian A. Herter Park. La ubicación de Cambridge es la más accesible en transporte público y ofrece las mejores vistas de la ciudad.
Boston está rodeada de pequeñas islas naturales, la más cercana y popular de las cuales es Spectacle Island, compuesta inicialmente por dos pequeños drumlins unidos por un espigón.
Se cree que su nombre se debe a su parecido con un par de gafas. Actualmente es un parque público con puerto deportivo, centro de visitantes, cafetería, playa con socorristas y ocho kilómetros de senderos.
No hay nada como ver el horizonte de una ciudad al atardecer. Hay muchos operadores que ofrecen cruceros al atardecer. Algunos ofrecen también comida y bebida en el paquete, mientras que otros se centran en el paseo en sí.
Jamaica Pond es perfecto para correr, pasear, hacer picnics y pescar (el lago se llena de truchas arco iris cada primavera).
Otras paradas populares son Leverett Pond, el Arnold Arboretum, Franklin Park y Back Bay Fens.
En general, Boston es una ciudad segura para los turistas. Sin embargo, como en cualquier gran ciudad, es importante tomar precauciones de sentido común y ser consciente de lo que le rodea.
Más que una ciudad
La verdad es que Boston es mucho más que una ciudad de judías. Se la ha llamado así por las judías cocidas a fuego lento en melaza.
Es una de las ciudades más diversas de Estados Unidos en las que he estado. La riqueza cultural procede de varios grupos raciales y étnicos distribuidos por toda la zona.
En conclusión, Boston ofrece una cautivadora mezcla de historia, cultura y belleza sin fin. Es importante explorar todos sus lugares emblemáticos, deleitarse con sus delicias culinarias y sumergirse en sus vibrantes barrios. También hay que disfrutar de la belleza de la naturaleza y vivir la cultura deportiva de la ciudad.
Con su puente azul, su lago lleno de cisnes y sus sauces caídos, es un mágico país de cuento.
